Rice Krispies Treats

Introducción

Entiendo la vida como pura magia, los pequeños detalles que afloran y confluyen, la complicidad hasta en la forma de coger una taza de café. Entiendo que la gente sufre del homme pressé más que nunca en una ciudad como Madrid. Entiendo que todo el mundo va a lo suyo porque hay que buscarse los garbanzos. Pero no puedo tolerar que se viva con bigotes tiesos, sin curiosidad y sin abrir los ojos y sin reírse a mandíbula batiente o sonreír tímidamente. Esto no es un curso de risoterapia sino de sentir la vida, soñar, soñar hasta no decir nunca basta, respirar. Por esto mismo, os propuse que me diérais vuestras "palabras masticables", esa palabras que os gustan, que os hacen sentir bien, a todos los que estuvisteis cerca de mí en ese hormiguero y vuestra curiosidad tenía que contar con un esfuerzo por mi parte, una receta de cocina, porque los ingredientes para cambiar de un sufrimiento a una sonrisa está ahí fuera, solo hay que encontrar, mejor dicho, buscar la forma de cambiarla, siquiera un instante. A los que intervinisteis, esto es en parte vuestro. A los que no, que les den por saco.

Ingredientes

exactamente, bosque, camiseta, fiable, capaz, col, sagacidad, desembocadura, venga, gabacho, nota, cariño, singular, ratito, albóndiga, lenteja, travesura, almizcle, pequeñito, mantequilla, transida, inanición, tiquismiquis, cachivache, cariz, rubor, pitote, carambola, gorgorito, cisco, candente, rimbombante, diletante, lerdo, zote, naskante, txotxolo, acariciar, susurrar, vivir, remolonear, haraganear, dar y recibir y volver a dar, saborear, deleitar, evocar, soñar, insoslayable, pasmo, ardiente, inescrutable, mezcolanza, masticar, insondable, melífluo, desbarrancar, guiño, catarsis, farándula, escuchimizado, chatarra, bombón, mañana, dulce, quilombo, fascinante, retorno, pasajero, cosa, mariposa, arte, ingenio, milagro, pasión, acojonante, intenso, brutal, cucurucho, saltimbanqui, dirigible, chatarrero, rimbombante, cacharro, esperpento, bajuno, simposium, atorrante, desorbitante, diluvio, intempestivo, reconfortante, acequia, compartir, desastre, brutal, en vano, cuchichear, precioso, olisquear, reverberante, alféizar, chocolate, letanía, éxtasis, pletórico, iridiscente, vórtice, cósmico, esperpento, vodevil, colibrí, azuzar, melocotón, sempiterno, cacatúa, melocotón, peluquín.



Preparación

Era un día de hojas de otoño caídas. El bosque tenía la peculiaridad de la primavera constante, del eterno “próximo tren llegará en un minuto” de los andenes. Miraba desde la ventana de una pecera, de un café que le traía muy buenos recuerdos, del amor de su vida que, por circunstancias de la vida, le dejó plantado. Descubrió que el amor duele, pero lo que más duele es ser consciente de que el daño siempre lo producía él. En un pasmo, ardiente, sabía que al día siguiente, ese sonido de “mañana” tendría otro significado y más susurrado, billete de avión, así algo más cósmico que el rimbombante billete de autobús o de cercanías. Muchos de sus amigos consideraban esto como una travesura propia de sus hijos de 7 años en la escuela, pero él ya había cumplido los 35 y apenas le quedan cartas que jugar, y deslizado por encima de una terraza de mantequilla, no encontraba el momento de detenerse, en vano escrutaba las miradas de los otros, en vano saboreaba el esperténtico diluvio que caía sobre sus espaldas en las comidas familiares.

-Buenos días, pequeñito. Un rubor inmediato, inescrutable le ascendió por las mejillas. Hacía casi dos años que no la veía y como un tópico de película en blanco y negro, estás como siempre. Era una gran mentira y masticaba la realidad como un bombón compartido. Estaba estupenda, fresca como un melocotón, fascinante, de esos que anuncian en la tele y que dan ganas de arrancárselo de la boca a ella, en un frenesí intenso, catarsis de todos estos meses nefastos, ocultando el desastre con peluquines movidos.

-Buenos días y una mezcolanza de playas infinitas, de sueños que se sellaron, Tengo prisa, fue gracioso encontrarte de nuevo, me esperan en casa que el nene ya se habrá despertado.

Chatarrero, chatarrero. Es la imagen que mejor define este cigarrillo con el que evoco ese milagro, ese pasajero retorno. Ella estaba mojada por la lluvia y al final, cada uno hizo lo que debía y lo más reconfortante para mí fui huir, no marcar el territorio, lejos lejos, acechando un desastre en cada acto, olisqueando abatido, construyendo una vida intempestiva, propia más de un vodevil que de una persona de provecho. La cuenta corriente era más asunto de otoños que de happy end y aquellos cucuruchos de chocolate en vacaciones eternas con sonrisas, se fulminaron. La evidencia de ese encuentro desbarrancaba los recuerdos y dolían como en una desembocadura.

Dos veranos más tarde, aquella mañana con dos tostadas y un café largo, varios periódicos, qué quieres, siempre fue un niño más bien distraído, azuzó las pasiones más remolonas y en un ratito que fue el de soñar con meterse en el 50 y saborear, deleitarse en el cariño de una dirección emergida de la página treinta y siete de El País. Quería volver a dislocarse la clavícula con ese buenos días, pequeñito, consistente como un plato de lentejas con albóndigas. Nunca se consideró un tiquismiquis, por lo tanto, cualquier cosa le valía, un cachivache, aunque buscaba un beso almizcle, intempestivo, en fin, candente. Su historia venía de un pueblo de Burgos donde veraneaban ambos, lejos de la farándula de Barcelona y sus encuentros eran más olvidos sucesivos que otra cosa, pero quería esa última oportunidad y se había anudado él solito la corbata.

Agradecimientos

klas
lee
enma
ángel
salomé
Patri
Leo
Esther
Maider
Marcos
Carmen
Mariela
Leticia Amato
Silvia
Rosa
Paula Lorenzo
inés
elisa
Leticia Medina
Alberto
Sonsoles

No hay comentarios:

Publicar un comentario